
7 cosas que solo pueden decir los hijos de un triatleta
Esto de ser triatleta, padre y escribir en Planeta Triatlón no es nada fácil. Bosco (17 meses) pegado a mí con una cara de sueño que no puede más. Yo escribiendo cosas que mis cuatro hijos le dicen a su papá triatleta. La inocencia de unos niños de 7, 5, y 3 años y otro de 17 meses (aunque este último sólo me pide el chupete) poniendo en apuros a papá con preguntas o afirmaciones que a veces es difícil contestar.
Aquí van las 7 cosas que un hijo le dice a su papá triatleta:
Nunca desayunas con nosotros. Siempre estás entrenando
Bueno, por lo menos no me dijeron que siempre estaba en el bar tomando carajillos con los amigotes. Sí, madrugamos mucho para entrenar, pero lo hacemos para luego estar más tiempo con ellos. Nos sacrificamos mucho, pero al final estamos dando ejemplo. Papá madruga mucho, entrena porque quiere conseguir un objetivo. Lucha por ello. No hay nada mejor que educar a unos niños bajo los valores que nos aporta el deporte.
¿Has ganado la carrera?
Es la pregunta que más rabia me da responder. “No”. Sus ojos iluminados esperando una alegría por parte de su padre, pero tengo que decirle que en el Ironman de Lanzarote quedé el 925 de casi 2000 participantes. Su cara es un poema. Pero es lo que hay. Trato de explicarle que yo nunca podré ganar a Frodeno, Kienle o Raña, pero Jacobo insiste y me pide que por lo menos sea “el tercero”.

¿Has comprado churros?
Durante las vacaciones es la pregunta más repetitiva por parte de mi hijo Jacobo (5 años). Salir con la bici y volver con unos churritos. Era para verme en la cola de la churrería a pie de playa a las 11 de la mañana. Con la cabra, el caso aero, el mono de triatlón y la bolsa con los churros colgada en los acoples. Para el próximo verano creo que pondré una cestita.
¿Fútbol o triatlón?
Para muchos de vosotros será una pregunta con una fácil respuesta. Para mí no. Y para los que vengamos del fútbol, tampoco lo será. Tantos buenos ratos dando patadas a un balón y ahora nos da miedo echar una pachanga por temor a lesionarnos y arruinar nuestra participación en una carrera. ¿Si me das a elegir ahora? Bueno, vale. Venga. No hay dudas: triatlón.

¿Por qué eres un Ironman y no Batman?
Esta pregunta me la hizo mi hijo Pablo de 2 años en el Ironman de Lanzarote. Tanto Ironman para arriba, Ironman para abajo que su imaginación se fue a lo verdaderamente importante para él: los superhéroes. Aunque yo si tuviera que quedarme con uno, me quedaría sin duda con Superman.
¿Por qué mamá no corre un medio?
Que papá sea un loco que disfruta corriendo carreras de 12 y 13 horas no significa que mamá también tenga que estar loca. Aquí en casa ya hablamos de medios como si fuera lo mismo que ir a comprar el pan a la gasolinera “ Mamá, un medio lo haces con la gorra, es la mitad de un Ironman.”, decía Lucas. Y mamá dice que no. ¿Os imagináis el caos que sería en una familia con 4 hijos como la nuestra el organizarse para entrenar? ¿Quien hace primero la tirada larga? ¿La hacemos juntos? ¿Y los niños? Inviable. De momento ella el Padel y yo el triatlón. Y tan felices.
¿Nos vamos al Ironman de Hawaii?
Después de acabar el Ironman de Lanzarote reuní a los niños y mi mujer para elegir destino de cara al Ironman 2017. Jacobo era partidario de Frankfurt. Pablo quería ir a la playa, el destino para él era indiferente y Lucas, el mayor, me salió con Hawaii. Ya va entendiendo y sabe que papá sueña con correr algún día el Campeonato del Mundo Ironman que se disputa en la mítica Kona. De momento esta pregunta tiene una respuesta negativa, pero quién sabe. La vida son sueños y los sueños están para cumplirlos. Lucas, alguna vez te contestaré con un “Sí”.