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David Castro: "Tuve que cambiar drásticamente lo que estaba haciendo"

"He ganado más en los últimos tres meses que en los últimos cinco años". Pocas frases resumen mejor lo que ha vivido David Castro durante estas últimas temporadas y cómo han cambiado las cosas para él.

2021 ha sido un gran año para el de La Roda. "El mejor de toda mi carrera", dice. En el palmarés de esta temporada dos campeonatos de España (sprint y olímpico), dos victorias en Copa de Europa y un título mundial, el de Acuatlón.

El triatleta del E.Q.T.R valora su triunfo por partida doble en Copa de Europa (Barcelona y Quarteira), donde nunca había conseguido una victorias hasta ahora, sólo un podio en 2015. "Era otro de los objetivos que me había marcado: conseguir el mayor número de puntos posibles", para escalar posiciones en el ranking.

Además del oro logrado en el mundial de Acuatlón, aunque "no estaba previsto" competir en El Anillo. "Pero salió la oportunidad de poder ir y acabé muy contento con el triunfo", explica.

Bañolas, la victoria más importante de 2021

Pero, si hay un triunfo que pesa más que cualquiera de los otros, ese es logrado en Bañolas, en distancia olímpica. "Era uno de los objetivos que me había marcado desde que empecé en el triatlón y se me resistía", explica David a Planeta Triatlón.

El Torero ha corrido la prueba hasta en ocho ocasiones y, aunque ha estado cerca en muchas ocasiones con varios podios, nunca lo había conseguido.

"Fue un triunfo bastante importante para mí", asegura Castro, que en aquel entonces "llevaba tres meses sin competir, había pasado el COVID y llegaba con un poco de dudas".

La cita en el nacional lo puso a prueba una vez más. "Tuve que emplearme al máximo psicológicamente para poder competir", dice sobre una prueba marcada la dureza. "El calor y un par de fallos en las transiciones que pusieron la carrera cuesta arriba". Pero David tuvo sangre fría y supo confiar en sí mismo para no volver a cometer viejos errores.

Victoria en Quarteira para saldar cuentas

David Castro puso punto y final a la temporada 2021 de la mejor forma posible, con una importante victoria en Quarteira. Y no por el triunfo en sí, sino por todo lo que significó para él.

"Terminar ganando en la última carrera y en una prueba donde, en 2017, empecé a darme cuenta de que algo no iba bien y me tuve que retirar, era como una cuenta pendiente que tenía", explica el Torero.

David necesitaba ver que estaba bien, tanto física como mentalmente, y en Portugal pudo comprobarlo con sus padres, su actual entrenador y sus antiguos técnicos de la Blume entre el público. "Es un recuerdo muy especial que me llevo para mí", apunta.

"Para mí era muy importante porque pensaba que estaba haciendo las cosas muy bien (entrenaba, me encontraba físicamente muy bien en los tres deportes), pero luego me costaba llevarla a competición", nos cuenta.

¿Los motivos? Tal y como él mismo señaló en sus redes sociales tras la victoria, "en 2017-2018 entré en un bucle en el que competía mal y perdí esa vena competitiva". El triatleta tuvo problemas para volver a sentirse competitivo, pero ahora las cosas han cambiado.

"Tuve que cambiar drásticamente lo que estaba haciendo"

A toro pasado, el de La Roda reconoce que "hacía las cosas muy mal", pero durante un tiempo los resultados, "entre comillas", acompañaron. Y ese fue uno de los problemas¨: "Eso no me hacía estar mejor, sino hacer las cosas peor y peor hasta entrar en un bucle y agujero del que fue complicado salir".

En 2019 acabó explotando por alargar una situación difícil para él. "Tuve que cambiar drásticamente lo que estaba haciendo". Fue el momento dejar la Blume y poner un punto y aparte. "Dejé un mes de entrenar porque no sabía lo que hacer", asegura.

David Castro
Foto: David Castro / Instagram

El primer paso fue cambiar de entrenador y ponerse bajo la batuta de Amando Guerrero. El segundo, cambiar de aires. "Me fui a Galicia tres meses y allí conseguí cambiar el chip".

Dos años después, aquella decisión ha dado sus frutos. "Me he adaptado muy bien y he vuelto a disfrutar entrenando", explica David, al que también le ha venido bien rodearse de la experiencia de alguien como Javi Gómez Noya.

"Todas las cosas aprendidas en la concentración con Javi las he sabido trasladar a los entrenamientos y he aprendido a llevar las cosas con cierta filosofía", cuenta.

Cambiar la mentalidad, la clave para volver a encontrar el éxito

Para Castro la clave pasaba por dar en el clic de la confianza y volver a disfrutar, "ahí es donde se ven los resultados", asegura. Ahora ha aprendido a no pensar demasiado en la competición: "Hay que darle la importancia que tiene, ni más, ni menos".

En todo ese proceso ha sido importante el papel de Guerrero, su nuevo míster. "Me permite cierta liberta en mi día a día. Me sale irme a Canarias con un amigo, me voy. Me sale irme con Javi a Cozumel, me voy", desliza el campeón de España.

David ha logrado confiar de lleno en la figura de su entrenador y en la suya propia de cara a las competiciones. "Me dice lo que tengo que hacer y confío plenamente en él. Se trataba de eso, de ganar confianza compitiendo, que era donde estaba el estrés y la ansiedad".

Ahora el campeón del mundo de Acuatlón ha logrado "competir de otra manera y con otra mentalidad", y esa ha sido la clave para volver a sacar toda su calidad a flote.

Saber disfrutar, la mejor moraleja

Dice David Castro que de todo este proceso hay muchas enseñanzas que extraer, pero se queda con una: "Hay que saber disfrutar el día a día", asegura. Para él "no importa dónde entrenes, con quién entrenes ni lo que entrenes". Tampoco "el grupo, que estés en el mejor o el peor sitio o que entrenes una cosa u otra".

Para el de Albacete la clave "cómo lo entrenas". "Si vas con actitud positiva da igual entrenar sólo, con el mejor triatleta del mundo, con chavales pequeños o en el rodillo", asegura.

Una enseñanza que el internacional español aprendió durante la cuarentena, según cuenta a Planeta Triatlón. "Ahí estábamos todos al mismo nivel y no había excusas. Psicológicamente era un choque, pero no valía esconderte ni sentirte una víctima", fue entonces cuando aprendió "valorar lo que tenemos", como tantos otros triatletas que nos enfrentamos a esa dura situación.

El ganador de la Copa de Europa de Barcelona reconoce que "era súper perfeccionista y nunca me sentía satisfecho", pero con la cuarentena "aprendí a valorar el mero hecho de poder salir en bici un día".

Ahora, igual que la gran masa de deportistas populares y probablemente la mayoría de profesionales, David se siente "afortunado de poder competir cada fin de semana. Estoy disfrutando más que nunca".

David Castro
Foto: David Castro / Instagram

Las Series Mundiales son el próximo objetivo

Precisamente hoy, 1 de diciembre, David Castro vuelve a al trabajo tras unas semanas de descanso. El de La Roda ha aprovechado "para estar por casa" e incluso "visitar sitios de Albacete que no había visitado".

Estas semanas han servido al triatletas para "intentar desconectar y hacer las cosas que no puedo hacer cuando estoy entrenando". También para obligarse a desconectar y descansar antes de una temporada en la que ya tiene objetivos. "Se agradece ahora perder la forma", dice Castro, "la temporada luego se hace larga".

En 2022 el Torero quiere regresar a las Series Mundiales. "Hacer un buen resultado que me permita estar en varias pruebas" y "sobre todo coger experiencia en ese nivel".

Porque sus ambiciones van mucho más allá y pasan también por París 2024. "¿Por qué no pensar en la clasificación olímpica? Es algo que está presente en mi cabeza desde que empecé a hacer triatlón", cuenta.

La llama de los Juegos nunca se ha apagado en su cabeza y ahora David quiere intentarlo.

Lo que también tiene claro es que le costará salir de la corta distancia. "Quiero apurar los años en categoría élite y ojalá sea de los más veteranos en correr ese formato".

A Castro, de momento, no le llama la larga. "Sobre todo por los entrenamientos, me parecen aburridos", explica. Por eso se ve "con 35 o 40 años haciendo corta distancia".

Sea en corta o sea en larga, ojalá vengan muchos más triunfos para el triatlón español de la mano de David, que hoy vuelve al trabajo "con muchas ganas de hacer las cosas bien y ver qué depara el año 2022".

La mejor de las suertes, Torero.

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