
¿Cuál es la forma adecuada de evaluar la fatiga en el rendimiento deportivo?
Una correcta evaluación de la fatiga en deportistas es sin duda una de las tareas más delicadas e importantes de cualquier entrenador que se precie. Y no hablamos sólo de fatiga física, existen otro tipo de fatigas que también comprometen el rendimiento deportivo, como es el caso de la fatiga mental.
Aunque en Planeta Triatlón ya hemos abordado este concepto en otras ocasiones, ahora lo hacemos de la mano un marco más actualizado, como es el proporcionado por un reciente estudio sobre la fatiga y el rendimiento humano.
Esta revisión, llevada a cabo de manera conjunta por varias universidades alemanas y francesas, tuvo entre sus objetivos actualizar el marco y la definición de fatiga, actualizar sus determinantes o discutir los mecanismos que impulsan la fatiga de rendimiento y la fatiga percibida en respuesta a tareas motoras y cognitivas, entre otros.
En su revisión, Behrens et al; 2022 creen que el marco actual no incluye "varios aspectos importantes" y no discute exhaustivamente la "interdependencia de los mecanismos que impulsan la fatigabilidad en el rendimiento y la fatigabilidad percibida".
Es decir, la disminución de una medida objetiva del desempeño (fatiga objetiva) y las sensaciones que regulan la integridad del ejecutante (fatiga percibida).
El nuevo marco multifactorial de la fatiga
En este contexto, esta publicación de la famosa Sports Medicine, pone en escena los conceptos de fatiga cognitiva de desempeño y fatiga cognitiva percibida y diferentes determinantes importantes como la percepción de esfuerzo, la valencia afectiva o la autorregulación.
La revisión de Behrens y colaboradores propone definir el estado de fatiga inducido por la tarea motora o cognitiva como una condición psicofisiológica caracterizada por una disminución en el rendimiento motor o cognitivo (es decir, fatiga del rendimiento motor o cognitivo, respectivamente) y/o una mayor percepción de fatiga (es decir, fatiga motora o cognitiva percibida), y señala que estas dimensiones son interdependientes y dependen, a su vez, de diferentes determinantes.

Es decir, la fatiga del rendimiento -el dato objetivo que refleja cuánto exactamente decae el rendimiento- y la fatiga percibida por el deportista como respuesta a un entrenamiento o competición a nivel físico o cognitivo, así como sus determinantes, son interdependientes y no deben considerarse de forma aislada.
La fatiga del rendimiento motor y la fatiga del rendimiento cognitivo
Tanto la fatiga del rendimiento motor (lo que conocemos como fatiga muscular), que se puede definir como una disminución en la capacidad máxima de producción de fuerza voluntaria del sistema neuromuscular, como la fatiga del rendimiento cognitivo o disminución en una medida de rendimiento cognitivo objetivo (cambios en el tiempo de reacción, su variabilidad, y/o precisión), así como sus dimensiones perceptivas dependen de:
- Homeostasis corporal: temperatura corporal, sueño…
- Factores moduladores: edad, género, carga de entrenamiento, enfermedades…
Por ello, Behrens et al señalan que "no existe un único factor que determine principalmente la fatiga de rendimiento y la fatiga percibida en respuesta a tareas motoras o cognitivas", mientras que "el peso relativo de cada determinante y su interacción están modulados por varios factores".

¿Qué quiere decir todo esto? Tal y como apunta Roberto Cejuela, entrenador de Roberto Sánchez Mantecón o Fernando Alarza, en su última publicación de Instagram, para una correcta evaluación de la fatiga "necesitamos evaluar la fatiga de rendimiento (fisiológica) y la fatiga percibida".
Esta evaluación combinada de las medidas de la fatiga de rendimiento y la fatiga percibida, así como sus correlatos (neuro)fisiológicos, para desentrañar la psicofisiología de la fatiga "ayudará a comprender mejor las interacciones entre las diferentes dimensiones de la fatiga y su impacto en el rendimiento humano", explica Cejuela.
Algo indispensable para "diseñar intervenciones eficaces para aumentar la tolerancia al ejercicio y el rendimiento humano" y evitar convertirte en Lionel Sanders.