
"Fuga masiva" en la corta distancia: los mejores del mundo se lanzan a la media distancia
Algo bien se está haciendo en la media distancia cuando cada vez son más los triatletas que deciden subirse al barco (aunque sólo sea momentáneamente).
Durante mucho tiempo, lo habitual fue que un triatleta explotara al máximo sus capacidades en la corta distancia ante de tomar la decisión de dar un salto a las pruebas sin drafting.
Años atrás, los triatletas que se atrevían a compaginar la media distancia y las Series Mundiales eran bastante escasos: el más atrevido fue Javier Gómez Noya y sus ganas de competir en múltiples formatos llevó a Jan Frodeno a decir que El Capitán era demasiado ambicioso.

Sin embargo, en estas últimas temporadas, ese paradigma ha cambiado por completo y cada vez son más las grandes estrellas ITU que deciden aventurarse en las pruebas sin drafting, pero sin haber puesto fin a sus objetivos en la corta.
Hombres como Kristian Blummenfelt o Gustav Iden han seguido estos últimos años los pasos de Javier Gómez Noya o Alistair Brownlee queriendo también su trozo de pastel en el circuito internacional de media distancia.
Por si no fuera suficiente, los Noruegos se atrevieron en un mismo año a meter en la ecuación a la larga distancia. Y ya sabemos cómo continúa la historia.
Pero ellos no han sido los únicos. Todo apunta a que, en este 2022, muchas pruebas sin drafting tendrán presentes a grandes estrellas ITU.
Taylor Knibb, Vincent Luis o Marten Van Riel también se suben al barco
En las últimas temporadas hemos visto como grande triatletas de las Series Mundiales decidían ponerse a prueba en la media distancia.
Uno de los primeros fue Marten Van Riel. El belga debutó a finales de 2019 con victoria en el 70.3 Xiamen y ahora acaba de anunciar que estará en la salida de un IRONMAN 70.3 Dubái que asusta.
A Van Riel le siguieron dos de los que fueran sus compañeros habituales de entrenamientos: Vincent Luis estuvo en el Campeonato del Mundo de la PTO de Daytona (2020) y hace unos meses acompañó en su estreno en la distancia a Jelle Geens, en IRONMAN 70.3 Indian Wells.
Al francés parece que le ha gustado la experiencia. Y es que hace tan sólo unas horas OTSO Challenge Salou ha anunciado que el Campeón del Mundo ITU de 2019 competirá en la Costa Daurada el próximo mes de abril.
Junto a él estará otro hombre de corta distancia. Hace unos días la organización también confirmaba la presencia de Roberto Sánchez Mantecón.
Aunque el subcampeón de Europa ha fijado sus principales objetivos para este año en la corta, el pupilo de Roberto Cejuela quiere compararse "con grandes deportistas de media distancia".
Pero no son sólo ellos los que se atreven con la media distancia. El pasado la estadounidense Taylor Knibb sorprendió al mundo del triatlón con varias exhibiciones en pruebas sin drafting: segundo puesto en IRONMAN 70.3 Boulder, victoria en la Collins Cup y bronce en el Campeonato del Mundo de IRONMAN 70.3.
Más casos españoles: Mario Mola, Fernando Alarza y Sara Pérez
El de Roberto Sánchez Mantecón no es el único triatleta español que ha decidido compaginar la corta y la media distancia.
Entre los nuestros, destaca el caso reciente de Sara Pérez, que, tras estrenarse con éxito el pasado año, decidió dar un paso al frente. La subcampeona del mundo de Challenge, fan confesa de la corta, ha apostado por hacerse un hueco entre los grandes nombres femeninos del sin drafting y de momento no le va nada mal.

Además, en este 2022 todo apunta a que tendremos a otros dos españoles de Series Mundiales dejándose ver por alguna prueba de media. Hace unos meses Fernando Alarza ya desveló sus intenciones de participar este año en pruebas de media distancia, mientras que Mario Mola lo hacía hace tan sólo unos días.
El manchego ya sabe lo que es ganar en la modalidad. Lo consiguió en IRONMAN 70.3 Cascáis en 2018, donde no tuvo rival. Para Mario, 2022 será el año de debut sobre la cabra.
¿Por qué cada vez más triatletas deciden competir en media distancia?
La respuesta podría dar para otro artículo, pero trataremos de resumirlo: dinero y exposición.
Sara Pérez lo explicaba de manera muy sencilla hace unos meses: "La corta no me da dinero, la media sí". La llegada de la PTO y sus inversiones millonarias ha cambiado por completo las reglas del juego.
Gracias al apoyo de esta entidad las pruebas de media distancia han experimentado un salto muy importante a diversos niveles. Eso se traduce en que cada vez son más los triatletas de corta distancia que ven una oportunidad para impulsar sus carreras en esta modalidad.
Probablemente el dinero sea el principal motivo. Recordemos que la PTO repartirá en 3 pruebas casi tanto dinero como IRONMAN y World Triathlon en más de 100 y es lógico que muchos triatletas quieran pelear por estar en ellas y en los primeros puestos del ranking a final de año.
Pero la cosa no trata sólo de dinero. Una pieza fundamental de la carrera de todo triatleta la componen las marcas que le acompañan, y estas quieren algo a cambio.
El calendario internacional de media distancia ha sido capaz de lograr un impacto mediático casi sin precedentes. La PTO se ha convertido en un gigante de la creación de contenido, dando a sus triatletas una exposición casi impensable.
Además, han sido capaz de llevar nuestro deporte a los grandes medios: el pasado año la Collins Cup se pudo ver en Eurosport.
Y todo esto, en cierto modo, ha creado una pescadilla que se muerde la cola: más dinero, más exposición, más nivel y cada día más triatletas que se quieren sumar a la fiesta.
Esperemos que la rueda no deje de girar.