Gustav Iden firma el segundo contrato ciclista más importante... ¡gracias a su gorra!
El noruego Gustav Iden sorprendió a propios y extraños el pasado ocho de septiembre cuando se coronó Campeón del Mundo de IRONMAN 70.3 en su primera participación en la prueba.
Con triatletas del calibre de Patrick Lange, Javier Gómez Noya o Alistair Brownlee fue capaz de aguantar en el segmento ciclista y después imponer su ley en la carrera a pie. Y es que como dijo Jaime Menéndez de Luarca hace unos días, una prueba de media distancia ha pasado a ser un olímpico largo. En igualdad de condiciones, un triatleta ITU tiene más posibilidades de victoria que un experimentado IRONMAN.
Lo más sorprendende del triunfo de Iden fue que compitió con una bicicleta de carretera con acoples largos, una Specialized Venge. "Como no tengo patrocinador, no he podido encontrar una a mi medida", afirmó a pie de meta, en la primera entrevista concedida.
Gustav Iden
"Tengo una" -en referencia a la Felt B12 con la que compitió en Bahrein en 2018-, "pero está sin frenos, así que lo mismo moría hoy si la utilizaba, así que utilizar mi bici de ruta ha sido una buena elección".
Nuevo contrato con Giant
Apenas tres meses después, la situación ha cambiado. Estos últimos días le hemos podido ver en Instagram en tierras taiwanesas, donde había sido invitado por el gobierno, y donde finalmente ha firmado contrato de patrocinio con Giant, cuyos modelos de ruta y triatlón comenzará a usar a partir de ahora.
Según apuntaba Ginés Díaz en twitter, Gustav Iden pasa a ser el triatleta con el segundo mejor contrato ciclista de la actualidad.
Lo más curioso de todo es cómo ha llegado Iden a firmar este contrato. Tal como se han hecho eco desde triathlon.nl, la gorra que llevaba en el Campeonato del Mundo de IRONMAN 70.3 ha sido el detonante.
La gorra, que Iden se encontró en el suelo días antes de una competición en Tokio, lleva impresos unos caracteres chinos, 埔鹽順澤宮, que curiosamente corresponden al nombre de un templo taiwanés, el Puyan Shunze, en la localidad de Changhua.
En poco tiempo el templo, que de otra manera sería tranquilo, se inundó de fanáticos del triatlón que querían conseguir su gorra. Desde entonces, se han vendido más de 40.000 unidades.
La noticia llegó al gobierno, que invitó al compañero de entrenamientos de Casper Stornes y Kristian Blummenfelt a visitar el país. Y de regalo, el contrato con Giant.
"Ya hemos firmado los contratos, nos hemos sonreído y ahora a por el oro", escribía en Instagram ayer. "Gracias Giant por creer en mi, y muchas gracias por incluirme en la familia".
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