
7 hierbas y especias naturales para combatir la inflamación
La inflamación es una respuesta normal del cuerpo ante una lesión o enfermedad, ya que tiene como función proteger el tejido dañado y facilitar su reparación. Sin embargo, en el mundo del deporte, la inflamación puede ser un enemigo del rendimiento ya que puede causar dolor, hinchazón y rigidez en las articulaciones, lo que puede impedir el movimiento correcto y disminuir la capacidad física del atleta.
Además, la inflamación también puede afectar la recuperación después de un entrenamiento o competición, ya que reduce la capacidad del cuerpo para reparar y reconstruir el tejido muscular dañado.
Por lo tanto, es importante controlar la inflamación para mantener un buen rendimiento deportivo y evitar lesiones en el futuro.
Aunque como explica el doctor y triatleta Chris Boettcher, "la gran industria farmacéutica nos ha hecho creer que solo los medicamentos adquiridos en farmacia son los que nos van a ayudar a reducir esta inflamación", no es del todo cierto.
Afortunadamente, existen algunas hierbas y especias naturales que pueden ayudar a combatir la inflamación y mejorar la salud en general.
El jengibre
Una de las más populares es el jengibre, que cuenta con propiedades antiinflamatorias y analgésicas debido a su contenido en gingeroles y shgaols.
Los gingeroles son los responsables del sabor picante del jengibre, mientras que los shgaols son los responsables del sabor dulce. Además de sus funciones antiinflamatorias se ha demostrado que los gingeroles y los shgaols tienen beneficios para la digestión y para el sistema inmunológico.
Además, el jengibre también tiene un efecto termogénico que ayuda a quemar grasas y mejorar la digestión. Se puede consumir en forma de té o agregando un poco de raíz fresca a las comidas.
El ajo
El ajo también es una excelente opción para combatir la inflamación, ya que contiene un compuesto llamado alicina que tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Se ha demostrado que consumir alrededor de un diente de ajo al día ya es suficiente para ayudar en este aspecto.
Otra gran ventaja de la alicina es que sirve como un agente antimicrobiano natural y puede ayudar a combatir infecciones y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Además, otro beneficio relevante del ajo es que también ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y a prevenir enfermedades cardiovasculares. Se puede consumir crudo o cocido en las comidas.
La cúrcuma
La cúrcuma es otra hierba que no puede faltar en la lucha contra la inflamación, ya que su principal componente, la curcumina, tiene un fuerte poder antiinflamatorio y antioxidantes. En palabras de Boettcher, "la curcumina ayuda a eliminar las moléculas llamadas radicales libres, que dañan las membranas celulares y el ADN y provocan inflamación".
Además, la cúrcuma ayuda a mejorar la digestión y a prevenir enfermedades del corazón y el cáncer.

El romero
El romero también es una excelente opción para combatir la inflamación, ya que contiene un compuesto llamado rosmarinic que tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
Además, también ayuda a mejorar la digestión y a prevenir enfermedades del corazón y el cáncer. Se puede consumir en forma de té o agregando unas hojas frescas a las comidas.
El tomillo
El tomillo también es una excelente opción para combatir la inflamación, ya que contiene un compuesto llamado timol -un aceite esencial-, con un gran número de propiedades, más allá de "simplemente" las antiinflamatorias y antioxidantes.
Conocido por sus propiedades medicinales, tiene efectos antisépticos, antiinflamatorios, analgésicos y expectorantes. Por lo tanto, se utiliza para tratar diferentes afecciones, como resfriados, tos, dolor de garganta, infecciones de la piel, entre otros.
Además, el timol es un ingrediente común en productos de belleza, como cremas, lociones y aceites, ya que tiene propiedades tonificantes y rejuvenecedoras para la piel.
Además, también ayuda a mejorar la digestión y a prevenir enfermedades del corazón y el cáncer. Se puede consumir en forma de té o agregando unas hojas frescas a las comidas.
El orégano
El orégano es una hierba conocida por su sabor y aroma, pero también es una planta con propiedades antiinflamatorias que pueden ser beneficiosas para la salud.
Esto es así gracias al aceite esencial que se encuentra dentro de su estructura, el carvacrol.
Su aceite esencial contiene un compuesto llamado carvacrol, que tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Además, el orégano también contiene vitaminas y minerales que pueden ayudar a fortalecer el sistema.

Se ha demostrado que el carvracol cuenta también tiene propiedades analgésicas y sedantes, por lo que puede ser utilizado para aliviar dolores de cabeza y otros dolores leves. También se ha demostrado que tiene un efecto positivo en el sistema nervioso, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad.
Otra de las virtudes del carvracol es su acción desinfectante y cicatrizante, lo que lo convierte en un excelente remedio para tratar heridas y quemaduras. Además, también se ha utilizado para tratar afecciones respiratorias como bronquitis y asma, ya que ayuda a despejar las vías respiratorias y a calmar la tos.
Las semillas de alholva
Según explica Chris Boettcher, "las semillas de alholva tienen un alto contenido en fibra soluble, que ralentiza la digestión y la absorción de carbohidratos y azúcar, estabilizando el azúcar en sangre".
Además, estas semillas contienen ácidos grasos esenciales como el ácido linoleico y el ácido oleico, que son fundamentales para la salud del corazón y el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
También contienen vitamina E, un potente antioxidante que ayuda a prevenir el daño celular y a mejorar la salud de la piel. En resumen, las semillas de alholva son una excelente opción para reducir la inflamación en nuestro cuerpo y mejorar nuestra salud en general.