
Los adelantamientos peligrosos a ciclistas ya son delito en Irlanda
Este martes, 12 de diciembre ha entrado una nueva ley en vigor en Irlanda que tipifica como delito los adelantamientos indebidos y peligrosos a ciclistas. A partir de ahora, los conductores que pongan en peligro a los ciclistas al adelantarlos en las carreteras irlandesas, serán multados con 120 euros y perderán tres puntos del carnet de conducir. Esta nueva ley ha sido posible gracias al esfuerzo de varios colectivos, Policía irlandesa y autoridades que creían necesario desarrollar un mecanismo legal para luchar contra los conductores que ponen en peligro la vida de los ciclistas.
La introducción de la nueva ley irá acompañada de nuevos letreros en las carreteras que advertirán a los conductores del espacio necesario que deben dejar al adelantar a los ciclistas.
Distancia de seguridad
La nueva ley establece que en ciudad y cuando el límite de velocidad no supere los 50 km/h, los vehículos a motor deberán dejar al menos un metro de distancia con el ciclista. Si la vía tiene un límite de velocidad superior a los 50 km/h, los conductores deberán dejar metro y medio de distancia.
El Ministro de Transporte, Shane Ross, es uno de los principales defensores de esta medida, cansado ya de ver y escuchar historias de cómo los ciclistas son casi arrollados por los coches. "Y todos somos conscientes del preocupante número de ciclistas que mueren y resultan heridos en nuestras carreteras, a pesar de la tendencia a la baja de las muertes en carretera en general", dice Ross.
Las nuevas medidas han sido bien recibidas por la Policía irlandesa, que esperaban que el aumento de las penas -junto con una serie de medidas educativas- cambiara el comportamiento de los conductores. En Irlanda este año ya llevan nueve ciclistas muertos en sus carreteras, frente a los ocho que murieron en el mismo período de 2018.
Otra de las medidas propuesta por el Ministro de Transporte, Ross, es la de reservar un puesto para una persona con experiencia en ciclismo en el Consejo de Administración del órgano irlandés competente en materia de Transporte e Infraestructuras.
Aun con todo, el colectivo ciclista irlandés considera que es un gesto simbólico que no hará la vida más segura para los ciclistas y que la multa es demasiado pequeña para cambiar el comportamiento de los conductores. Desde luego si 120 euros es el precio que se pone a una vida, creo que todavía tienen que cambiar mucho las cosas y, aunque sea un primer paso, la multa es irrisoria en comparación con el peligro de matar a ciclistas en carretera. En todo Europa queda todavía mucho por hacer...