Pello Osoro y su triunfo en Vitoria: "Era una oportunidad que tenía que aprovechar"

Buenas noticias para Pello Osoro quien consiguió imponerse en el Half de Vitoria en lo que sería también la despedida de Eneko Llanos del deporte profesional. Una carrera marcada por el ambiente festivo que predominaba en la capital del País Vasco.

La jornada también estuvo marcada por las condiciones climatológicas, ya que la lluvia hizo acto de presencia. El agua hizo complicar las cosas a los participantes del Half, quien más de uno tuvo algún contratiempo en forma de caída.

Una natación difícil no impidió la victoria

"Sabía que era una carrera que se me daba bien. Encima, siendo cerca de casa, era una oportunidad que tenía que aprovechar. Se me tenía que dar bien porque, básicamente, era una bici rápida", comentó Osoro al describir su confianza previa a la carrera.

A pesar de no conocer el circuito en profundidad, era consciente de que se trataba de una ruta veloz: "Los entrenamientos me estaban yendo bien. Si que es verdad que la última noche lo pasé un poco mal. Tenía la cabeza cargada y empecé a darle muchas vueltas a la cabeza. Al final decidí salir. Lo tienes que intentar ya que estás ahí".

La natación, como siempre, presentó dificultades para el triatleta: "Vi como se me iba un grupito y me quedé atrás. Intenté nadar a tope. Tenía la sensación de ir un poco ahogado y que los de delante se me iban. Esa sensación estoy más que acostumbrado y salí del agua noveno".

La bicicleta y la lluvia: dos factores fundamentales para explicar su día

La etapa de ciclismo fue clave para Osoro. Salió a toda velocidad y comenzó a superar competidores gradualmente: "Salí a tope y fui pasando gente poco a poco. En el kilómetro 15 pillé a Eneko Llanos y Mikel Múgica. La verdad es que llegué ahí bastante quemado. Por delante de ellos solo iba Montiel y la gente que estaba por la carretera nos estaba diciendo que había una diferencia de tres minutos. Al llegar a ellos decidí quedarme atrás y esperar mi momento".

No sería hasta el kilómetro 45 cuando Pello Osoro diera un puñetazo en la mesa que definiría bastante su victoria en la ciudad vasca: "Decidí intentarlo, meter un cambio brusco. Me puse cinco o diez minutos prácticamente a tope y, por suerte, conseguí soltarlos. A partir de ahí, yo ya fui a lo mío. Tenía que intentar gestionar la fuerza de ir a tope hasta el kilómetro 90, y creo que cogí a Montiel por el 75".

La segunda transición fue crucial para Osoro, ya que logró una ventaja de varios minutos sobre sus perseguidores. Con Montiel a varios minutos de distancia y Eneko y Mikel aún más atrás, Osoro comenzó la etapa de carrera a pie, pero no con muchas esperanzas: "La verdad que lo veía muy negro. Esperaba que por detrás viniese Montiel como una moto y me daban referencias de dos minutos. Al final vi que no me estaban recortando y, encima, me dijeron que el que venía por detrás era Eneko, que yo sí que sabía que no iba a fallar, pero sus ritmos no eran de venir volando".

El triatleta se encontraba en una situación complicada durante la carrera a pie. Aunque sufría mucho, tuvo la suerte de que una tormenta repentina comenzara a arrojar lluvia sobre la competición: "Me volví a despertar un poco con la lluvia y pude aguantar. Tuve un pequeño susto en la última vuelta porque era un recorrido de mucho giro, mucha cuesta y con la lluvia se puso un poco peligroso. Tan peligroso que, en una bajada en la última vuelta, me caí".

Al final, Osoro cruzó la línea de meta en primer lugar, certificando una victoria en la que tuvo que echar bastante de fe y fuerzas para poder remontar y coronarse en un día especial para uno de sus rivales en esta última batalla para Eneko Llanos.