
La plancha abdominal en el enfoque del entrenamiento funcional
La plancha abdominal es un ejercicio que se ha popularizado en los últimos años en el ámbito del entrenamiento funcional.
Aunque ya hemos hablado largo y tendido de ella -si has llegado a este artículo a través de alguna búsqueda en concreto-, definiremos este ejercicio, grosso modo, como aquel en el que mantenemos el cuerpo en posición horizontal sobre los antebrazos y los dedos de los pies, mientras se mantiene la postura abdominal bien contraída.
¿Qué es exactamente el entrenamiento funcional?
Hablamos del planking como un exponente del entrenamiento funcional, ¿pero a qué nos referimos exactamente con este término?
El entrenamiento funcional es un enfoque en el que se busca trabajar la musculatura de manera que se mejore la capacidad de realizar actividades cotidianas de manera eficiente y segura.
Este tipo de entrenamiento se enfoca en el desarrollo de la fuerza, la estabilidad y la flexibilidad en movimientos que se asemejan a los que se realizan en la vida diaria, como levantar objetos pesados o subir escaleras. Además, el entrenamiento funcional también busca mejorar la postura y prevenir lesiones.

Aspecto importante: el paleotraining, que pusieron de moda Carlos Pérez y Airam Fernández hace casi una década, no es exactamente entrenamiento funcional. Éste segundo se enfoca en simular los movimientos y actividades que realizaban nuestros antepasados durante la época paleolítica.
Este tipo de entrenamiento se basa en la idea de que nuestro cuerpo está diseñado para realizar ciertos movimientos y actividades que se han perdido en la actualidad debido a la vida sedentaria y a la utilización de herramientas y tecnología.
¿Hay mucha diferencia entre entrenamiento funcional y entrenamiento en el gimnasio?
El entrenamiento funcional y el entrenamiento en gimnasio son dos enfoques diferentes que tienen sus propios beneficios. El entrenamiento en gimnasio suele enfocarse en el desarrollo de la fuerza y el tamaño muscular a través de ejercicios con pesas y máquinas.
Por otro lado, el entrenamiento funcional se enfoca en el desarrollo de la fuerza y la estabilidad en movimientos que se asemejan a la vida cotidiana.
¿Cuál de los dos es mejor?
En cuanto a cuál es mejor, dependerá de los objetivos individuales de cada persona. Si lo que se busca es mejorar la fuerza y el tamaño muscular, el entrenamiento en gimnasio puede ser una opción adecuada.
Sin embargo, si lo que se busca es mejorar la capacidad para realizar actividades cotidianas de manera segura y eficiente, el entrenamiento funcional puede ser una mejor opción.
En cualquier caso, es importante consultar con un profesional para determinar el enfoque de entrenamiento más adecuado para cada persona.
Volvamos a la plancha abdominal, el entrenamiento funcional y sus ventajas...
Aunque a simple vista pueda parecer un ejercicio sencillo, la realidad es que el planking requiere de un gran esfuerzo y estabilidad en todo el cuerpo.
Además, al trabajar la musculatura abdominal en una postura de estabilidad, se consigue una mayor activación de los músculos profundos, lo que resulta en una mayor eficiencia en su entrenamiento.

En el enfoque del entrenamiento funcional, la plancha abdominal tiene un papel importante ya que se trata de un ejercicio que trabaja la fuerza y la estabilidad en una postura que se asemeja a la de la vida cotidiana. Al trabajar en una posición horizontal, se simula la postura que adoptamos al realizar tareas como levantar objetos pesados del suelo o mover muebles.
Además, entrenar el core también tiene un efecto positivo en la prevención de lesiones. Al fortalecer la musculatura de toda la zona media, se mejora la estabilidad de la columna vertebral y se reduce el riesgo de sufrir dolor lumbar o lesiones en la espalda.
Otro beneficio importante es que, como buen entrenamiento funcional, se trata de un ejercicio que se puede realizar en cualquier lugar y sin necesidad de utilizar equipamiento especial.