
¿Qué pasará con los triatletas que habían clasificado para un Kona 2023?
No corren días fáciles en las oficinas de IRONMAN. La compañía se encuentra sumida en una profunda crisis mediática desde que este pasado miércoles anunciara una de las decisiones más temidas por sus clientes: el Campeonato del Mundo IRONMAN saldrá de Kona en 2023.
La noticia saltaba a la palestra informativa este semana, cuando Triathlon Today aseguraba que el Mundial masculino llegaría a Niza en 2023, mientras las chicas se quedaban en Kona. En 2024, ambos sexos se intercambiarían los papeles: los chicos regresarían a Kona, mientras las féminas viajarían hasta Francia.
Todo eran suposiciones y miedos hasta que, apenas unas horas después, IRONMAN confirmaba los rumores.
"En el caso de la prueba masculina, se está evaluando la fecha y el lugar fuera de Hawái y se espera que se anuncie en enero de 2023. Para 2024, las carreras masculinas y femeninas intercambiarían su ubicación, y los hombres correrían en Kona", explica el comunicado emitido por la compañía.

Al anuncio de IRONMAN han seguidos unos intensos días en los que toda la comunidad de este deporte ha decidido manifestarse: atletas profesionales, aficionados, entrenadores, ex deportistas. Como cabía esperar, la noticia no ha sido bien recibida por gran parte del mundo del triatlón y las críticas han inundado el tejado de IRONMAN.
"Me dan ganas de vomitar", ha llegado a decir el ex ciclista profesional Laurent Jalabert, clasificado para Kona en IRONMAN Cascais, el pasado octubre.
En este contexto, el máximo responsables de la empresa, Andrew Messick, se ha visto obligado a realizar varias apariciones en medios para tratar de apaciguar la tormenta que gira sobre su compañía.
El CEO de IRONMAN ha respondido a las preguntas de numerosos medios internacionales como Triathlete, Slowtwitch o Trimag, donde ha ahondado en los motivos de la polémica decisión y ha hablado sobre el futuro inmediato de este Campeonato del Mundo.
Dos promesas por cumplir
En julio de este año, IRONMAN anunció que el novedoso formato de dos días se extendería también a 2023. Era lo que la compañía había fijado en sus expectativas y para lo que había trabajado junto al alcalde, el condado y la comunidad de Kona.
Sin embargo, tras el caos experimentado en octubre, durante la celebración del evento, la comunidad se echó encima.
"Nos quedamos en una posición en la que hicimos dos promesas: una promesa para que hombres y mujeres tengan su propio día de carreras, y la promesa de que todos estén en Kona en 2023. Y no pudimos cumplir ambas promesas", explica Messick a Triathlete.
Llegados a este punto, IRONMAN tuvo que apostar a la promesa más importante. "Nuestra conclusión es que es más importante que haya dos días de carrera. Es más importante que las mujeres tengan la oportunidad de tener su propia carrera".
Por supuesto, eso amplía las posibilidades de negocio de IRONMAN. "Hay más oportunidades para que los hombres y las mujeres de los grupos de edad puedan clasificarse para un campeonato mundial".
Una opción para impedir la salida del Mundial de Hawái podría haber sido celebrar la carrera en fines de semana distintos. Separados incluso meses. Podría pero no. Porque la comunidad no ha dado su brazo a torcer.
"Tratamos de ser tan creativos y reflexivos como pudimos, ya sabes, si no es jueves, sábado, ¿qué tal sábado y sábado? ¿Qué tal una carrera en octubre en una carrera en otro momento?", explica el CEO. Pero Kona sólo ha aceptado acoger a IRONMAN una vez al año.
¿Por qué no se ha desvelado la sede?
Ahora, sabemos que el próximo mundial tendrá dos sedes distintas. Sin embargo, muchos de nosotros nos preguntamos por qué IRONMAN no ha confirmado cuál será ese segundo escenario que entra en juego en 2023.
Por otro lado, muchos aficionados no entienden tampoco cómo IROMAN ha podido estar vendiendo slots a Kona a sabiendas de que no habría Kona. Una reacción tardía y mal ejecutada.
"No podemos decirte dónde vas, pero podemos decirte dónde no vas a ir”. Y eso es mejor que simplemente decir: 'Estén atentos'", comenta Messick.

"También tenemos tres carreras clasificatorias más en 2022: tenemos Nueva Zelanda, Australia Occidental y Argentina", dice. "Sabemos que es frustrante no poder contarles a todos la historia completa, pero una historia incompleta es útil para cierto grupo de personas".
En este sentido, lo único que ha desvelado el máximo responsable de IRONMAN es que están seguros de "haber encontrado un lugar y un lugar que le va a gustar a nuestra comunidad". También sabemos que será el mismo escenario al que las mujeres lleguen en 2024, cuando los chicos vuelvan a Kona. En cuanto a fechas, la idea es encajar lo mejor posible en el calendario con el resto de "eventos importantes". Para IRONMAN: Kona, el Campeonato del Mundo 70.3 e incluso el UTMB.
¿Y los triatletas que habían clasificado para un Kona 2023?
En estos momentos, IRONMAN analiza la situación de los triatletas que clasificaron para una carrera en Kona, tanto profesionales como grupos de edad.
"Vamos a tomar una determinación entre ahora y enero", dice Messick. ¿Las posibilidades? "Transferir esos slots al nuevo destino masculino en 2023 o dejarlos pasar a Kona en 2024. Parte de lo que haremos en enero es delinear las reglas de compromiso para las personas que ya calificaron para Kona en 2023".