Richard Murray, multado con 95 euros por ir en bici usando el móvil
Por desgracia, el uso de los móviles en los ciclistas es algo normalizado. Es un hecho innegable. Al igual que muchos conductores lo hacen al volante, lo mismo podemos decir con la bicicleta. El último en ser multado ha sido Richard Murray, uno de los habituales en esta práctica, de la que, para más inri, se confiesa fiel seguidor.
Ha sido en Holanda
Tras hace dos temporadas abandonar la disciplina del equipo de entrenamiento de Joel Filliol, en la que compartía día a día con Mario Mola, Jakob Bortwhistle o Katie Zaferes, el sudafricano cambió sus hábitos y se trasladó a Países Bajos, de donde es Rachel Klamer, su actual pareja.
Desde allí va, como gran parte de los triatletas del circuito internacional, desplazándose en función del calendario: este pasado sábado se hacía con la cuarta plaza en Montreal, y este fin de semana volverá a competir en Hamburgo, localidad de infausto recuerdo para él, ya que en 2017 fue descalificado por comportamiento antideportivo.
No obstante, en estos últimos días ha tenido tiempo para, en Holanda, tierra de ciclistas, ser multado. La policía le cazó mientras utilizaba el móvil y multado con 95 euros, según publicaba en sus stories de Instagram.

Por desgracia, es una práctica habitual
No es una práctica aislada de los corredores populares, los PROs también lo hacen. Es muy fácil pasarse por el InstaStories de muchos triatletas o ciclistas que suben fotos o vídeos de su potenciómetro, de la grupeta con la que marchan o así mismos. Lo hace Murray, sí, pero también lo hace Jan Frodeno, Purito Rodríguez -que incluso fue sancionado- o el recientemente accidentado Chris Froome. Estas prácticas son doblemente nocivas. Los profesionales pueden ser un espejo en el que se miren los fans. Si lo hace un PRO, ¿por qué no lo voy a hacer yo?
Sin embargo, Richard es de los más prolíficos generando contenido durante sus sesiones de entrenamiento o durante cortos traslados. Ver su Instagram a diario es sinónimo de dos o tres fotos o vídeos en la bicicleta. Incluso alguna vez había sido advertido por algún seguidor del peligro de esta práctica y el triatleta respondió de malas maneras.
Usar el móvil en una bicicleta es un peligro no solo para el corredor, si no para el resto. Si vas en una grupeta utilizándolo puedes hacer un afilador y provocar la caída del resto. También puedes desviarte de la trayectoria y estrellarte contra un automóvil. Por eso hay que tener más conciencia sobre este tipo de actos.