
Sanders: ¿adiós temporal a la larga distancia?
Si hay alguien que ha salido señalado del Campeonato del Mundo de IRONMAN, ha sido Lionel Sanders. El canadiense, segundo en St. George, llegaba a tierras hawaiianas con la incógnita de qué nos íbamos a encontrar de él, si la que está en la pelea por el triunfo, o la que no es capaz de entrar en carrera y termina andando camino de la meta en Kailua Bay.
Lamentablemente, tocó cruz y el de Canyon entró a casi cincuenta minutos de Gustav Iden, sin haber encontrado las buenas sensaciones en ningún momento. Su reflexión en su canal de Youtube si hizo esperar, y no fue hasta ayer miércoles que pudimos saber sus impresiones sobre lo ocurrido.
"Haber tenido una mala carrera me hace sentir como si hubiese decepcionado a mi familia, pero sé que no es así", dice en los primers instantes del vídeo.
"Lo hice lo mejor que pude. No podría haberlo hecho mejor. Llegué muy bien entrenado y creo que eso pudo haber sido parte del problema; trabajé muy duro y creo que eso pudo haber sido parte del problema".
Desde su punto de vista, uno de los grandes problemas es que ha llegado cansado a la prueba, y no solo en los últimos meses, él mismo retrocede hasta hace casi año y medio. "En los últimos quince meses he participado en siete IRONMAN, y he tenido muchas sesiones de entrenamiento confeccionadas para emular la prueba, que es algo que nunca había hecho antes".

"En algún punto del camino dejé de recuperar", explica. "Después de IRONMAN Florida estaba entusiasmado, entonces fui a IRONMAN 70.3 Indian Wells, que aumentó mi entusiasmo, y empecé a entrenar muy duro para St. George. Después de St. George me sentía en la cima del mundo y ni siquiera me tomé una semana de descanso, porque justo después competía en la PTO de Dallas".
A partir de ahí, todo apunta a que el cuerpo de Sanders ha dicho basta: "No le he dado tiempo para recuperarse y cada prueba ha ido a peor. En Mont-Tremblant me sentía bastante mal a nivel interno, igual que en Edmonton. En la Collins Cup me sentía terriblemente mal. En Dallas me sentía fatal y después llega Kona, que ha supuesto mi peor resultado".
Imitar a los noruegos, un gran problema
En los últimos meses se había especulado con que el entrenamiento de los noruegos, que Sanders estaba haciendo suyo, sería fructífero. Él mismo apunta a que puede que no se haya adaptado a los volúmenes tan exigentes que ha marcado Mikal Iden.
"Hemos intentado copiar a Gus y a Blummenfelt", explica a la cámara, "pero no estoy seguro de que ese sea el enfoque que me funciona a mí, porque es evidente que me estoy deteriorando".

Incertidumbre sobre el futuro
La gran duda a partir de ahora es saber qué va a hacer en 2023 Sanders, que ya en la Collins Cup de 2021 dejó entrever que en algún momento se había planteado aparcar la larga distancia y centrarse únicamente en la media, donde ha demostrado a lo largo del tiempo ser muy competitivo.
"Me llevo dos aprendizajes de esta carrera: que estoy extremadamente cansado y que tengo que lograr estar al nivel de Kristian y Gustav en media distancia si quiero estar a su nivel en larga distancia".
Si bien había renunciado a mejorar la natación, para centrarse en sacar una mayor ventaja en el segmento ciclista y en la carrera a pie, todo apunta a que volverá a dedicar tiempo a arañar segundos al cronómetro en el agua.
"Mi objetivo es estar al nivel del grupo de Magnus Ditlev", manifiesta. "Eso es lo mínimo que necesito hacer. Si no logras hacerlo entonces tienes un año antes de darle la razón a los críticos y admitir que los mejores años han pasado y que no estás hecho para el escenario mundial".
¿Adiós a la larga distancia?
"Volveré a competir en campeonatos mundiales de larga distancia, y más concretamente en Kona, cuando haya llegado al nivel necesario para nadar codo con codo con Magnus Ditlev".
En este contexto, habrá que esperar a ver cómo evoluciona los próximos meses. Pero a priori, y a sus 34 años, todo apunta a que habrá un impasse de espera hasta que vuelva a verse competitivo en los 226 kilómetros.