Lionel Sanders reconoce que, en la TriBattle, él era un mero sparring
Cuando hace un par de fines de semana se disputó la TriBattle, todos los espectadores quedamos sorprendidos del nivel de profesionalidad del evento.
Teniendo en cuenta que "en teoría", todo surgió por una serie de publicaciones de instagram cruzadas entre Jan Frodeno y Lionel Sanders, lo visto allí distaba mucho del concepto "improvisación".
Solo había que ver el despliegue de medios: no solo en las activaciones previas con las activaciones de los patrocinadores, si no también el día de la prueba. Desde la cuerda reflectante para guiarles en el segmento de natación, hasta los avituallamientos en marcha o la curva de Canyon para no perder tiempo en los giros de 180 grados...
Esta noche hemos podido saber que, efectivamente, la TriBattle no fue algo improvisado.
Ha sido el propio Sanders el que se ha encargado de reconocerlo en su último vídeo de youtube.
Lionel Sanders
"La verdad es que esto se llevaba gestando desde hace más de un año", reconoce el de Canyon a la cámara. "Jan quería hacer el intento de récord del mundo el año pasado, pero tuvo el accidente, se rompió una costilla o algo así y no pudo hacerlo".
"Así que se replanteó para este verano", continúa. "Después de Challenge Miami -casi no tuve ni que apretarle-, disfrutó de que yo le metiera la presión en el cuerpo".
Un sparring de garantías
Según cuenta Sanders, Frodeno buscaba alguien con quien medirse en ese intento de récord del mundo, para tener el nivel de autoexigencia necesario que pudiese llevarle a bajar de las 7:35:39 logrados en Roth en 2016.
"Tras Miami creo que pensó que yo sería el adecuado", continúa. "Y es que un IRONMAN es un largo camino si lo haces en solitario".
"Así es como surgió la batalla cara a cara, pero la realidad es que siempre fue Jan quien iba a batir el récord mundial que ya poseía".
El aprendizaje que se lleva
Además de llevarse un 7:43 en distancia IRONMAN, Sanders se lleva una serie de aprendizajes de valor incalculable: "Pude ver a Jan de cerca y en persona. Pude ver cómo opera y piensa", cuenta en el vídeo.
Aunque tras su derrota hace tres años en Oceanside Sanders ya fue consciente de todo el trabajo que hay detrás del éxito de Frodeno, la TriBattle sirvió para refrendar los cambios que necesita hacer en su organigrama: "La gran conclusión es que todavía hay niveles por alcanzar", afirma Sanders".

"Frodeno está a un nivel diferente, obviamente en competición se ve, pero lo que no se ve es todo ese nivel que hay entre bastidores".
Sirva como ejemplo Challenge Mogan, donde el de Colonia se hizo con el triunfo: mientras gran parte de los participantes iban en solitario, Jan acudió con un equipo de siete personas, entre los que estaban su propio fisioterapeuta, su mánager, su fotógramo o su compañero de entrenamientos, Nick Kastelein, cuarto finalmente en meta.
Jan Frodeno
"Es un trabajador excepcional y tiene un talento único, pero también tiene un equipo increíble a su alrededor" reconoce Sanders.
El camino, desde su punto de vista, pasa por emular lo que Frodeno y los suyos hacen hasta llegar al día de la competición: "Tengo que analizar eso y ver que mi equipo lo hace igual de bien, que hacemos un buen trabajo, aunque creo que hay cosas que podríamos hacer mejor".
"Podríamos dedicarnos más, podríamos ser más profesionales, más serios en esto. Hay que ver los diferentes niveles que hay para ser serios en esto. Si te alejas de los mejores del mundo, nunca ves realmente lo que hacen y cómo lo hacen y el nivel de compromiso que tienen".