
Alex Zanardi, triatleta y piloto, reaparece en las 24 horas de Daytona
Hablar de Alessandro “Ale” Zanardi es hablar de la historia del automovilismo y desde 2014, también es hablar de la historia de un triatleta capaz de marcar el mejor tiempo en 2018 de un atleta discapacitado en Ironman Emilia Romagna: 8:26:06.
Alex Zanardi fue un gran piloto de automovilismo italiano que nos ha enamorado a generaciones de aficionados. Alex empezó a despuntar en karting, a pesar de venir de una familia humilde. En el mismo circuito en el que empezó a correr con un viejo kart, estaba Paolo Barilla, el hijo del dueño de las famosas pastas. Esta familia se dio cuenta de las grandes posibilidades deportivas de Alex y decidió apoyarle económicamente. Ganaría después el Campeonato nacional de Karting, el Campeonato de Formula 3, y muchas carreras en F3000 hasta llegar a la Formula 1.
15 de septiembre de 2001
Tras un gran accidente, cambió su carrera hacia la Fórmula Indy americana, donde ganaría dos títulos en 1997 y 1998. Durante la temporada 2001 tuvo muchos problemas, rodando siempre lejos de los puestos de cabeza, pero el 15 de septiembre se presentaba como un gran día para cambiar las cosas. Zanardi lideraba la prueba en la carrera de Lausitzring (Alemania) en la vuelta 143 de las 154 programadas cuando entró a los pits a repostar combustible. Pocos segundos después, el coche de Zanardi giraba por la pista fuera de control hasta empotrarse de frente con el canadiense Alex Tagliani, que rodaba en ese momento a más de 300 kilómetros por hora, lo que destruyó completamente la parte delantera del vehículo del piloto italiano. Como consecuencia, perdió las dos piernas. La rápida intervención de los médicos fue crucial para cortar la hemorragia que sufría el piloto en esos momentos. Menos de dos años después del accidente, volvía a sentarse a los mandos de un coche compitiendo para BMW en el FIA World Touring Car Championship.
Una cuestión de actitud
Hubiera sido fácil para Alex Zanardi darse por vencido. No deja de haber sido uno de los mejores pilotos de automovilismo del mundo durante unos años llegando a alcanzar velocidades en carrera de 418,6 km/h. Vamos, que sabe lo que es correr. En 2010, Zanardi cambiaría de deporte dedicándose al ciclismo adaptado y representando a Italia en los Juegos Paralímpicos 2012, ganando el oro para su país. En 2016, repetiría medalla de oro en Río.
El salto al triatlón
Como parece que todo esto no era suficiente, Zanardi debutó en triatlón en 2014. El pasado mes de septiembre establecía un nuevo récord mundial para triatletas con discapacidad en Ironman Cervia, en la región italiana de Emilia-Romagna: 8 horas, 26 minutos y 6 segundos
24 horas de Daytona
Hace unas horas que ondeaba la bandera verde en las 24 horas de Daytona, una carrera mítica que cualquiera de los 46 pilotos que hoy toman la salida querría ganar. Después de marcar el récord mundial de Ironman en su categoría en 2018, hoy Alex Zanardi sale a disputar la prueba y pilotando sin prótesis, argumentando para ello mayor competitividad para una prueba de resistencia como es Daytona.
Best of luck to IRONMAN athlete Alex Zanardi in this weekend’s @IMSA Rolex 24 at DAYTONA!
Zanardi lost both legs in a racing accident in 2001, but continues to push himself beyond what's possible, including a world best time for a disabled athlete during 2018 IRONMAN (8:26:06). pic.twitter.com/7VD9vmamjU
— IRONMAN Triathlon (@IRONMANtri) January 26, 2019
Y lo hará pilotando un BMW M8, con motor 4.0 V8 biturbo y 525 CV de potencia. Para ello Ale utiliza su mano izquierda agarrada al volante para tomar curvas, subir marchas y acelerar. La derecha, fuera del volante, le sirve para activar una leva de freno con botón que baja marchas.
Zanardi comparte asiento con sus compañeros del BMW Team RLL, John Edwards, Jesse Krohn y Chaz Mostert. Uno de los temas que más ha tenido que perfeccionar ha sido la entrada y salida del coche para los relevos. Cada uno de los pilotos deberá completar al menos dos horas y un máximo de trece.
“No es que estuviera esperando que me pasara algo como me pasó, pero pase lo que pase en la vida, si tienes curiosidad, siempre acabas dándote cuenta de que no siempre las cosas son buenas o malas. Tener curiosidad e intentar ver lo positivo de las cosas para utilizarlo como punto de inflexión hace ver las cosas que te ocurren como oportunidad. Creo que esta teoría deja de ser una teoría y se convierte en realidad cuando conoces mi historia”. Poco más que añadir a esta inteligente manera de ver la vida.