
Antonio Serrat le devuelve la sonrisa al triatlón español: quinto en Montreal
El triatleta vigués se confirma como el triatleta español de corta distancia más en forma y apunta al Top 10 final en el ranking de las Series Mundiales
El triatlón español ha vivido este verano sus momentos más difíciles en años. La Triarmada se presentó en Tokio con un equipo muy potente y cargado de títulos mundiales, pero el resultado estuvo muy lejos del esperado. Tras varias semanas de duelo y reflexión, Antonio Serrat ha conseguido que volvamos a mirar hacia delante.
Modo Juan Palomo, en plan el último de Filipinas, así se presentaba Antonio Serrat en Montreal, como el único español dispuesto a correr una carrera con un formato raro y en un momento del calendario que no apetecía. Sin embargo Antonio aceptó el reto.
"Lo importante es volver a correr el sábado, hay que centrarse en eso", nos decía en Planeta Triatlón unos días antes de estrenar el formato 'eliminator' en Series Mundiales. El viernes Serrat salía en la primera de las semifinales y corrió con cabeza, al final se metió en la final noveno de su serie y pudiendo mirar de reojo para ver quién venía por detrás.
Un formato muy divertido pero algo alejado del triatlón original
La final estaba presupuestada a tres mangas en distancia 300-7-2. Comenzaban 30 triatletas y en cada fase se eliminaban 10, así que en la ronda final solo quedarían los 10 mejores. Entre los participantes, casi todos los gallos del corral a excepción de Blummenfelt y Yee. Estaban todos los franceses, Hayden Wilde, Geens, Van Riel, Birtwhistle... mucha calidad.
La primera serie eliminatoria fue la más impresionante. Entraron un total de 21 atletas en tres segundos de diferencia, vamos, que parecía más un sprint ciclista que otra cosa. Serrat ahí se lo dejó todo para que no hubiera problemas y entró segundo en meta solo por detrás del bronce olímpico Hayden Wilde. Primera carrera superada.
La segunda manga, con los veinte mejores, fue otra cosa. El grupo ya no viajó tan junto y los franceses comenzaron a mostrar su hegemonía. Antonio Serrat entró por los pelos en la final superando por dos segundos al brasileño Miguel Hidalgo.
En la gran final entraron Vincent Luis, Wilde, Bergere, Coninx, Van Riel, McDowell y Birtwhistle como nombres más destacados.
La ronda final, con dos supersprint en las piernas, denotó cierto cansancio. De hecho la carrera cambió un poquito. Los triatletas dosificaron en la bicicleta mucho más y apretaron en la carrera a pie.
Como ya ocurriera en Leeds, Antonio fue valiente y salió a por todas, acarició el podio y se le escapó por apenas ocho segundos. Ganó Coninx seguido de Vincent Luis y Bergere, con Serrat quinto y Van Riel en puesto de medalla de chocolate.
Antonio Serrat ya es el mejor español en el ranking de la Series Mundiales y llega a la gran final de Edmonton con opciones de acercarse al quinto o sexto puesto mundial si la carrera le es propicia. No, el triatlón español no se acabó en Tokio.
