
Iván Raña, sobre su victoria en EPIC Triathlon: "era como estar en el km 38 de Hawaii"
Tras las victorias de Javier Gómez Noya y Marta Sánchez del sábado, ayer domingo llegaba a EPIC Triathlon el turno de la corta distancia, con la celebración de las pruebas olímpica y sprint. En esta segunda, un nombre destacaba por encima del resto. Era el de Iván Raña.
El gallego, noticia esta pasada semana por su vuelta a las competiciones internacionales, inscrito en IRONMAN 70.3 Cozumel, estuvo presente el sábado como comentarista de la retransmisión en directo, y ayer le tocaba ponerse el tritraje de faena para competir en los 750 metros de natación, 20 kilómetros de bici y 5 kilómetros finales de carrera a pie.
Desde que amaneció en Oropesa del Mar, una leve lluvia cubría el cielo, pero eso no desanimó a los triatletas que esperaban ansiosos ambas distancias. Mientras muchos se centraban en los tiempos, Iván Raña, estaban allí buscando reconectar con la esencia del deporte.
"Desde nadar sintiéndome fuerte, pasando por el ciclismo y luego las transiciones que, admito, hacía tiempo que no experimentaba, todo ha sido fantástico", confesó el gallego tras cruzar la meta en primera posición. Para él, el EPIC no era solo una competición más.
No fue, en absoluto, fácil. Pese a que salió del agua con una amplia ventaja, consolidada en el segmento ciclista, una vez se puso a correr notó la falta de práctica, del entrenamiento específico de transición. "Era como estar en el km 38 de Hawaii", reconoció, con la misma sensación de cansancio y dolor en las piernas.

Un circuito para recordar
La pasión de Iván no solo se limitaba a la prueba. Se desbordó al hablar del circuito: "Además, el circuito de bicicleta es espectacular, un lugar ideal para un campeonato oficial". Cada triatleta tiene ese circuito que le roba el aliento, y para el de Mobel, Oropesa del Mar ha dejado una marca.
Pero más allá de los tiempos, de las distancias y de los podios, para Iván, lo que realmente importa es lo que ocurre después de cruzar la meta. "Esas zonas post-meta donde todos nos reunimos, donde celebramos independientemente del resultado, es lo que realmente engancha de este deporte", refleja el veterano triatleta. Y añade: "Me encantó ver que nadie quería irse, fue como una gran reunión familiar".

Iván no estuvo solo en sus sensaciones. El EPIC Triathlon tuvo una participación impresionante, con más de 700 atletas durante el fin de semana. El director de Publicom, Héctor de la Cagiga, también destacó el éxito de la prueba, el regreso triunfal de Javi Gómez Noya y el crecimiento en inscripciones.