
Mielina: ¿qué es y cómo afecta a nuestro talento deportivo?
Comenzar un hábito nuevo, ya sea en cuanto alimentación o deporte, es complicado. La cosa se va haciendo más llevadera con el tiempo, pero ¿y si no fuera la fuerza de voluntad la que actúa? ¿y si hubiera algo más interviniendo en el proceso?
La mielina
La mielina, una sustancia compuesta de proteína y lípidos, actúa como capa aislante alrededor de los nervios, incluidos los situados en el cerebro y la médula espinal. De hecho, sus daños están relacionados con el desarrollo de enfermedades como la esclerosis múltiple.
Esta vaina permite que los impulsos eléctricos se transmitan de forma rápida y eficiente. Al aprender algo nuevo, nuestro cuerpo genera mielina, haciendo que esos patrones sean cada vez más fáciles.
¿Qué relación tiene con el deporte?
Los neurólogos afirman que una predisposición física y una buena capacidad mental son necesarias, pero estas no servirían de nada sin una abundante capa de mielina recubriendo los nervios del atleta, esta, afortunadamente, se puede desarrollar con entrenamiento específico.
Hasta hace poco, se pensaba que la función de esta sustancia era únicamente protectora, como el revestimiento de un cable eléctrico, pero ahora se sabe que, en determinadas condiciones, un estímulo nervioso aumenta la cantidad de mielina, lo que mejora el rendimiento del “circuito”.
Por lo que, si aumenta el grosor de la capa de mielina, aumenta también la calidad de los impulsos nerviosos, lo que se corresponde con un mejor rendimiento del atleta.

Cuanto más talento, más mielina
Los científicos se atreven a afirmar que la relación entre el talento y la cantidad de mielina en el organismo es más estrecha de lo que pensamos. Al contrario de lo que hasta ahora se creía, no se nace con genes “mágicos”.
Envolver con una gruesa capa de mielina los nervios requiere de mucho tiempo, si bien es cierto que durante la infancia se desarrolla de una forma más rápida, está demostrado que esta sustancia se sigue generando durante toda la vida y que todos podemos mejorar nuestras habilidades con la práctica.
El compromiso y la ilusión son claves
Ya sabemos que la mielina es una sustancia que nos ayuda a mejorar y que podemos producir esta sustancia, casi, a voluntad. A base de entrenamiento disciplinado y constante es como podemos maximizar la generación de este revestimiento alrededor de nuestros nervios.
Pero esta no es la única clave, el catalizador del proceso, es que los jóvenes o los deportistas en general tengan una predisposición a realizar dicha tarea en la que quieren mejorar y la capacidad de los entrenadores para inculcarles una buena técnica, espíritu de sacrificio y aún más ilusión por su deporte.
Dan Coyle, autor de la obra “Las claves del talento”, investigó el papel de la mielina en los deportistas viajando por todo el mundo para encontrar la razón por la cual en muchos países se forman tantos atletas de un mismo deporte.

La razón por la que de Brasil salen tantos futbolistas o en Republica Dominicana tantos jugadores de béisbol o por qué en Rusia, con medios mucho más precarios, son capaces de sacar adelante muchísimos más tenistas de éxito que en Estados Unidos se debe a la mielina.
En estos países, existe la predisposición a estos deportes de forma cultural, por lo que los niños comienzan desde muy temprana edad a practicar estas actividades. Esto, sumado a el factor motivacional, resulta en el coctel perfecto para que surjan deportistas de élite.